Cuando la iglesia pierde el equilibrio…
1ª Pedro 5:8a
En medio de una profunda polarización política que está en desarrollo en la sociedad secular y también dentro de la cristiandad, es muy importante y necesario volver a las escrituras para meditar en textos como este, en donde Dios imperativamente nos llama a ser Sobrios. Por lo tanto, creo oportuno compartir este artículo devocional a fin de reflexionar sobre el tema político que se está enquistando en medio de una cristiandad que está perdiendo el equilibrio de las escrituras y olvidando la base del evangelio que es la soberanía de Dios.
Es una imagen decadente, ver creyentes que opinan a través de las redes sociales con increíble violencia verbal y tendenciosa, defendiendo su propia postura política, y cayendo en la misma actitud violenta que dicen condenar de uno u otro lado. Está comprobado “la violencia genera violencia”. Pero la biblia dice: “No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal” Romanos 12:21
Esta evidente perdida de “sobriedad” de pastores y feligreses, que descargan violentamente sus posturas políticas (del color que sea) en plataformas cómodas y hasta cobardes, como lo son las redes sociales, es una alarma que no podemos ignora;, y que debe llamarnos a “volver los ojos al cielo” donde mora El Soberano que tiene todo bajo control. Los creyentes del primer siglo, al ver el escenario hostil y “pedregoso” que estaba significando la predicación del evangelio, nos deja un tremendo legado para nosotros los que vivimos en los postreros días. Lea y medite:
“Soberano Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay; que por boca de David tu siervo dijiste: ¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas?” Hechos 4: 24-25
Aquí vemos que los hermanos del primer siglo citaron el tremendo Salmo 2 que habla precisamente de Dios Soberano que está en los cielos; que tiene todo el control, y que aún se ríe de la insensatez de los hombres que se amotinan en la tierra (Salmos 2: 1-4). Esto es lo que deben enseñar los pastores a sus iglesias, y dejar de hablar tonteras, fantasías, mitos, y estar polarizando políticamente a los hermanos. Sed Sobrios dice El Señor.
Sobriedad (equilibrio)
“La sobriedad” que aparece en este texto selecto de 1ª Pedro 5:8a, proviene del vocablo griego que alude a la acción de estar debidamente “controlado y equilibrado”. También era usado para definir la “abstención del vino”, cuyo efecto, produce evidentemente “desequilibrio”, es decir, quien esta embriagado, no puede actuar ni caminar equilibradamente; sus pasos se inclinarán zigzagueantemente de izquierda a derecha. Es increíble, pero eso es lo que precisamente ocurre en la práctica, cuando los creyentes dejan de ser sobrios o pierden el equilibrio bíblico. Pero Dios quiere y ordena que nosotros procuremos siempre la “sobriedad”, es decir, pensar, hablar o actuar equilibradamente.
Un gran ejemplo que obtenemos en la biblia respecto a este punto, es el propio Señor Jesucristo cuando algunos fariseos y herodianos sagazmente lo quisieron poner a prueba, y le tentaron, pero Él no cayó en parcialidad política ni perdió su sobriedad o equilibrio cuando respondió: “Dad a César lo que es de César, y a Dios lo que es de Dios” Mateo 22:21
Desequilibrio del hombre pecador.
Obviamente, a nosotros los pecadores nos cuesta mucho pensar, hablar y actuar equilibradamente. Aunque sabemos que lo único que nos puede ayudar para ser sobrios, es el sometimiento a la verdad objetiva y absoluta de La Palabra de Dios, aun así, esto sigue siendo un gran desafío. Sabemos también que jamás nuestro subjetivismo (realidad que el individuo concibe a sí mismo) nos llevará a la sobriedad a la cual El Señor nos manda. Es necesario someterse a la voluntad de Dios revelada en su infalible Palabra.
Es muy importante dejar claramente establecido, que es el pecado que mora en nosotros que nos lleva a pensar, hablar o actuar con una absoluta pérdida de equilibrio. Mientras Dios nos manda a ser sobrios (equilibrados), descubrimos que nuestra naturaleza pecaminosa nos lleva al desequilibrio.
El Señor nos ayude en estos días de profunda convulsión político-social, porque el diablo sabe muy bien que la polarización es un caldo de cultivo para la destrucción. Y este riesgo no excluye a la cristiandad. Cristo dijo: “Si un reino está dividido contra sí mismo, tal reino no puede permanecer” Marcos 3:24
La iglesia de Cristo debe estar velando para evitar la pérdida de sobriedad o equilibrio. Una iglesia que deja de velar y de alumbrar el lugar oscuro con la única antorcha encendida que es la biblia, es una iglesia que esta propensa a la perdida de todo equilibrio, y finalmente al fracaso. El Señor nos ayude a mirar los hechos sociales locales y mundiales desde la perspectiva bíblica, profética, y no sobre bases de polarización política.
He estado observando a pastores que lentamente han comenzado a incluir opiniones de deliberación política en sus enseñanzas. Pablo advierte que un poco de levadura, leuda toda la masa (Gálatas 5:9). Hoy la cristiandad se está dividiendo en las antiguas facciones políticas; por un lado “la derecha” sin medir el ecumenismo frívolo que eso conlleva, y por otro lado, la facción de “izquierda”, haciendo caso omiso a la falta de argumento bíblico que tiene la agenda progresista. Es decir, un lado y otro, alteran la sobriedad o equilibrio a lo cual estamos mandados por el Señor.
Amados Hermanos, si hoy has descubierto que tu manera de pensar, hablar y actuar está evidenciando una evidente pérdida de sobriedad o equilibrio, y que has dejado de velar, El Señor te ordena a volver al punto del balance perfecto que solo te puede entregar la Palabra de Dios, la biblia. De este modo, abandonarás las estériles y destempladas opiniones cargadas de tendencias políticas de uno u otro sector, que en nada tienen que ver con la enseñanza y esperanza que nos entregan las escrituras. Sed Sobrios dice El Señor. Que así sea, amen. Maranata!
PEL 11/2019