¿Quién fue Charlie Kirk?
¿Un mártir del cristianismo?
«Porque la palabra de la cruz es necedad para los que se pierden, pero para nosotros los salvos es poder de Dios» (1a. Corintios 1:18)
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Debido a la amplia reacción mediática que ha significado el brutal asesinato del activista político estadounidense Charlie Kirk el pasado 10 de septiembre de 2025, y ante los homenajes póstumos que le han dado categoría de “mártir del cristianismo” refrendado por varios líderes evangélicos en el mundo, creemos necesario presentar este breve artículo para informar quien fue Charlie Kirk y aclarar qué tipo de cristianismo representaba él con su mixtura política.
El texto bíblico que encabeza este artículo resume el mensaje que todos los creyentes deben tener grabado como acero ardiente en sus corazones. Lo único que puede convertir al pecador, es el poder de la Palabra de Dios centrada en el sacrificio todo suficiente de la cruz. Si Dios no abre el corazón de un individuo, para este, la palabra de la cruz seguirá siendo una locura. Pablo decía:
“Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender…” 1ª corintios 2: 14
El predicar el evangelio no consiste en una reunión de dialéctica humana para pretender debatir y persuadir con estrategias comunicacionales a los no creyentes. Eso es un tiempo perdido, y nunca fue la manera de predicar de Cristo y de sus apóstoles. Si el mensaje del predicador tiene tintes políticos de cualquier color, el mensaje se mancilla, y Dios no lo aprueba, y su Palabra lo rechaza.
Ciertamente que este principio bíblico no estaba en las convicciones que movieron a Charlie Kirk para abrazar un “cristianismo” y una retórica absolutamente lejos del carácter de Cristo. El presentar la verdad desde un punto de vista de superioridad moral, con altivez de espíritu, y sin mansedumbre, no representa la impronta ni de Cristo, ni de sus apóstoles. Además de afiliarse a una facción política que presume representar los intereses de Dios, y abanderarse con ella, agudizó su error. En palabras directas y simples, Kirk nos deja un gran ejemplo de lo que no se debe hacer con el evangelio.
¿Quién fue Charlie Kirk?
Charles James Kirk nació en Illinois, Estados Unidos el año 1993, y a temprana edad se vio atraído por el ala ultraconservadora del partido republicano. Su buena oratoria y capacidad de convocar masas, lo llevó a un corto plazo a ocupar plataformas multitudinarias, acompañando al entonces candidato a senador Mark Steven Kirk, y posteriormente al mismísimo Donald Trump para las elecciones de los años 2016, 2020 y 2024.
El año 2019 fundó la organización política “Turning point action” (TPA que traducido es: Punto de inflexión) cuyo objetivo era impactar a jóvenes estudiantes, promoviendo los valores conservadores de manera activa en la enseñanza secundaria y universidades. Se dice que Turning point action está presente en más de 3.500 universidades y escuelas secundarias. Kirk acostumbraba cada semestre a hacer giras para convocar a multitud de estudiantes en distintos campus a nivel nacional, y desafiar las ideas con su propuesta de “cristianismo” republicano y conservador.
En la última gira llamada “’The American Comeback Tour’ (que traducido es: Gira del regreso americano) cuya primera parada y evento fue en la Universidad Utah Valley, el pasado 10 de septiembre de 2025, mientras Kirk repartía sus clásicos gorros rojos con la sigla MAGA, que significa “Make American Great Again” (que traducido es: Hagamos Grande a América Nuevamente), y con su polera blanca estampada con la palabra “freedoom” (que traducido es: Libertad), de modo sorpresivo, y luego de responder paradójicamente a una de las preguntas de los asistentes en relación a las muertes por el uso desmedido de armas en los Estados Unidos, Kirk recibió un tiro que le atravesó el cuello provocándole la muerte.
El “cristianismo” de Charlie Kirk
Charlie Kirk se unió a la organización Capilla Calvario junto al pastor Rob McCoy manteniendo su estrategia política de la sigla TP (Turning Point) con el fin de movilizar a los cristianos conservadores para que votaran por los republicanos. Kirk además abrazó la doctrina conocida como la “Nueva Reforma Apostólica” que promueve el “mandato de las siete colinas” cuyo concepto subyace en la teología dominionista o del reino aquí y ahora (del inglés Kingdom Now), en donde se insta a los cristianos a controlar siete ámbitos de la sociedad que son: gobierno o política, educación, medios de comunicación, artes y entretenimiento, negocios, familia y religión.
Por otro lado, en su libro “Detente en nombre de Dios” con su subtitulo “por qué guardar el sábado transformará tu vida”, Kirk revela su postura judaizante de guardar el Shabbat judío desde el viernes por la noche hasta el sábado por la noche, una disciplina que durante mucho tiempo había animado a otros a adoptar. Kirk estaba escribiendo el libro cuando falleció, pero su mensaje ahora llega a millones de personas. Creía que un shabbat semanal sin tecnología «aliviaría la ansiedad, combatiría la depresión y restauraría la salud de las familias estadounidenses». En un discurso público reciente, declaró: «Todos los viernes por la noche, guardo un sabbat judío. Apago mi teléfono desde el viernes por la noche hasta el sábado por la noche. El mundo no puede alcanzarme, y no recibo nada del mundo. Los bendecirá infinitamente».
Como seguidor de la agenda conservadora republicana de facciones de ultraderecha en los Estados Unidos, Charlie Kirk, enseñaba su fuerte rechazo a los asuntos relacionados como la agenda LGBTQ+, el aborto, la eutanasia y al llamado marxismo cultural. Fue un acérrimo opositor a la migración, promotor del racismo y la supremacía blanca, además de ser un activo defensor del porte de armas. Conocidas son sus frases a este respecto: «Algunas muertes son necesarias…creo que vale la pena pagar, por desgracia, algunas muertes por armas de fuego cada año para que podamos recurrir a la Segunda Enmienda y proteger nuestros derechos divinos…tener una ciudadanía armada tiene un precio, y eso es parte de la libertad”, declaraciones “pro armas” de un cristiano lejos del carácter de Cristo. Nuestro Señor Jesucristo decía:
“Oísteis que fue dicho: Ojo por ojo, y diente por diente. Pero yo os digo: No resistáis al que es malo; antes, a cualquiera que te hiera en la mejilla derecha, vuélvele también la otra; y al que quiera ponerte a pleito y quitarte la túnica, déjale también la capa; y a cualquiera que te obligue a llevar carga por una milla, ve con él dos” Mateo 5: 38-41
Una de las intervenciones de Kirk, en donde deja ver con claridad un cristianismo severo y sin misericordia, fue cuando un asistente a sus convocatorias le preguntaba sobre el asunto de la migración y ante los sufrimientos que este fenómeno ha provocado en familias y niños, Kirk respondió: “creo que mexicanos, nicaragüenses, salvadoreños, panameños, venezolanos, chilenos, todos deben irse…” – Cuando la misma persona le insiste diciéndole: “pero hay gente devastada de países pobres, niños, etc.”, Kirk responde categóricamente: “I don´t care” lo que que significa: ¡No me importa!, Con esta respuesta queda muy claro que su posición política republicana supera con creces la enseñanza puramente bíblica. Dios dice:
“Cuando el extranjero morare con vosotros en vuestra tierra, no le oprimiréis. Como a un natural de vosotros tendréis al extranjero que more entre vosotros, y lo amarás como a ti mismo; porque extranjeros fuisteis en la tierra de Egipto” Levítico 19:33-34
Todo cristiano medianamente instruido en la palabra de Dios descubre que no existe en la voluntad de Dios una idea nacionalista y antimigración como el hombre la ha presentado y defendido a sangre y fuego. La biblia abunda respecto al tema de la migración, y en particular en describir a un pueblo escogido que tuvo que migrar para su preservación (génesis 46). Abraham migró desde Ur de los Caldeos hacia otra tierra (génesis 12). El propio Señor Jesucristo, aún en los brazos de María tuvo que migrar para escapar de las garras de Herodes que había ordenado asesinar a todos los niños menores de dos años que había en Belén y en todos sus alrededores (Mateo 2).
Por lo tanto, “el cristianismo” que profesaba Charlie Kirk estaba tan contaminado con los tintes de las fanáticas ideas políticas ultraconservadoras y republicanas, que hasta llegó a decir que debía eliminarse la nacionalidad por nacimiento, es decir, si un individuo de familia inmigrante nacía en los Estados Unidos, no podía ser un estadounidense. ¿Acaso Kirk ignoraba que su propio país fue formado por un fenómeno migratorio? Porque nadie puede negar que los Estados Unidos es el resultado de la migración; porque desde los propios nativos que poblaron el continente incluyendo los de Alaska, eran emigrantes asiáticos, hasta los inmigrantes europeos que posteriormente se asentaron allí. Podríamos decir que la población de América es el resultado de la migración.
Al parecer todos los que “odian a los inmigrantes”, más bien “odian el color de piel”, y en especial a los negros. Porque aquí mismo en Chile vemos que la población mestiza sí mira con buenos ojos a un inmigrante europeo o anglosajón de tez blanca, pero mira con desdén a un inmigrante mulato. Entonces ¿Es aquel nacionalismo patriota que defendió Charlie Kirk hasta su muerte, lo que enseña la biblia a los creyentes en Cristo?
Charlie Kirk y el patriotismo nacionalista.
Tan igual como Charlie Kirk, la mayoría de las iglesias evangélicas en todo el mundo han abrazado una idea política que no está en la biblia: el patriotismo nacionalista. Quizás por las fuertes influencias y legado de la patrística, y de Agustín de Hipona en particular. Porque fue Agustín quien enseñaba que la violencia y las armas eran justificadas ante la demanda de “los intereses de Dios” para conquistar el poder temporal y avasallar el terreno de los infieles para traerlos a la “ciudad de Dios”. De ahí la base teológica que justificó las tristemente célebres masacres y genocidios, tales como las cruzadas, la llamada santa inquisición, el holocausto nazi, etc., y todo en “nombre de Dios”. No hay que ser teólogo ni eurito para entender que ese, de ningún modo, es el mensaje del evangelio.
La biblia nos enseña que, más que patriotas, debemos ser cristianos, es decir, seguir las enseñanzas de Cristo y sus apóstoles. Pablo decía: “Mas nuestra ciudadanía está en los cielos, de donde también esperamos al Salvador, al Señor Jesucristo” filipenses 3:20.
Así como se mencionaba algunos ejemplos bíblicos de migración en el pueblo de Israel, este mismo pueblo es un mal ejemplo de un exacerbado patriotismo nacionalista. De ahí los serios problemas de los religiosos “ultrones” que le rechinaban los dientes cuando veían y escuchaban que el evangelio de Salvación no era solo para los judíos, sino que también para el resto de las naciones. Ahí tenemos el caso de Cristo y su relación de misericordia para con una mujer sirofenicia (Mateo 15: 21-28). Era una mujer cananea, considerada por los judaizantes como un perro (Mateo 15: 26). Ciertamente la enseñanza de Jesús era disruptiva pero profundamente mansa, y eso desesperaba y descontrolaba a los líderes de Israel. Así fue cuando en uno de sus ejemplos, Cristo le responde a un maestro de la ley, ensalzando a un Samaritano como ejemplo a seguir (Lucas 10:25-37). Para el religioso, patriota y nacionalista judío, la respuesta de Jesús fue sin duda, una bofetada, porque la propia biblia dice: “Porque judíos y samaritanos no se tratan entre sí” Juan 4:9
En el caso del apóstol Pablo, la situación no era distinta. Los religiosos patriotas nacionalistas lo odiaban porque él enseñaba que el evangelio y el amor de Dios para salvación, no era un monopolio solo para Israel, sino que también para los extranjeros. Pablo decía:
“Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree; al judío, primeramente, y también al griego” romanos 1:16
Esas palabras que manan de la biblia, son un entrañable mensaje de amor no solo a quienes por misericordia están ya en la esfera de salvación, sino que aún a aquellos que están afuera con sus lenguas blasfemas y de incredulidad, tal cual, los creyentes estuvieron antes de la conversión. El mensaje del plan de Dios nunca tuvo la idea de fronteras, nacionalismos y patriotismo enfermizo, muy por el contrario, al final de esta larga historia, cuando El Rey venga a poner en orden todas las cosas, no existirán aquellas barreras ni egoísmos humanos encerrado en la semántica del llamado “patriotismo nacionalista”. Todos los redimidos, vivirán y coexistirán por toda la eternidad porque el pecado del dominio, del enseñoramiento de las naciones, de los pleitos, de la avaricia y del amor al dinero, ya habrán quedado atrás. Con justa razón Pedro decía: “Pero nosotros esperamos, según sus promesas, cielos nuevos y tierra nueva, en los cuales mora la justicia” 2ª Pedro 3:13. En aquel tiempo no habrá fronteras, ni fuerzas armadas, ni gobernantes corruptos e hipócritas que presumen su “cristianismo” a cambio de poder, porque El Señor Soberano y Todo poderoso reinará para siempre.
Finalmente, es necesario decir que ha sido muy lamentable que nadie haya instruido bíblicamente, y en la perspectiva correcta a este joven Charlie Kirk, quien fue brutalmente asesinado por el fanatismo que produce la ideologización política. Él escogió atrincherarse en un bando de extremismo político, y se presume que el bando contrario lo asesinó. Sin embargo, debe quedar claro que Charlie Kirk no es un mártir del cristianismo; mártir del partido republicano de los Estados Unidos puede ser, pero no del cristianismo bíblico. Ante esto, hay que guardar las proporciones.
Amados hermanos, la iglesia no esta en la tierra para conquistar los países para Cristo; esta para predicar la verdad del evangelio santo de Nuestro Señor Jesucristo, para perdón de pecados y justificación. El poder temporal lo recuperará El Señor cuando venga a reinar. Así que a seguir esperándolo. Amén. Maranata.
PEL 09/2025
